sábado, 10 de noviembre de 2012

Vivir en tu ausencia CAP-2

Aquí tenéis el segundo capitulo espero que os guste y pidáis siguiente, si no habéis leído el primero, está un poco más abajo. Bueno si veo que os gusta y tal, haré otro blog para que no sea tan lioso va? pero comentar por favor  si no podéis o algo mandadme un privado a The Perfect Obsesiond , si está mal escrito pero no me deja cambiarlo -.- 
Locura en forma de besos y gracias por leer :) 
______________

`No se si esto lo escucharás desde allá arriba pero allá voy. Nos cambiaste, solamente con haberte conocido hemos ganado mucho. Se que cada uno de nosotros tendremos al menos un recuerdo feliz junto a ti. Pocos son los malos, muy pocos. En mi caso ninguno. Tu tocaste mi corazón, tocaste mi alma. Tu cambiaste mi vida y todas mis metas. El amor es ciego y eso lo se porque mi corazón fue cegado por ti. Compartimos sueños, miedos, secretos y sonrisas. Te conozco bien, y tu a mi. Pero lo que no sabías es que me he vuelto adicta a ti. Llenaste mi vida de felicidad y amor. Ahora me siento vacía. Todavía me cuesta aceptar que te has ido, que ya no te voy a volver a ver. Se que odiarás cada una de las lágrimas derramadas por ti. Eres una gran persona, bondadosa y sincera, así te vamos a recordar. Al menos yo, cada vez que cierre los ojos te recordaré, como aquel chico de ojos verdes que me robó el corazón. Adiós mi creído, el imperfecto más perfecto´

Volví solo por ti. Para decirte lo sentía, sino explotaba. Durante la misa había sido fuerte, hasta que los vi. Vi a tus amigos llevando tu ataúd, llevándote sobre sus hombros. No me pude contener lo siento. Unos minutos después me tocaba a mi. Subí, sin mirar a nadie, comencé. No había preparado nada, así que dije lo que me rondaba por la cabeza. Oía sollozos, notaba pequeñas gotas de agua por mis mejillas. Pero seguí, sin que se me quebrase la voz, sin abrir los párpados. Mis palabras no iban dirigidas a ellos, sino a ti. Al terminar, lo primero que vi fue a Carlos. Ahora lo comprendía todo, porque  estaba tan ausente, porque había vuelto corriendo hacia el tanatorio, sin decirle nada. La gente aplaudía, tu madre se había derrumbado y tu padre la sujetaba. 

Bajé hasta donde ella, la abracé y me fui. Sabía que todas las miradas estaban puestas en mi, pero esa no era mi intención. Mi intención era desaparecer, largarme de allí, de la ciudad. Enrevesada en mis pensamientos, crucé la carretera. Estaba recordando todos tus sueños, los que no pudiste cumplir. Los pitidos de un camión me sobresaltaron, me quedé paralizada al verle tan cerca. Cerré los ojos, tras ver los tuyos en mi memoria, noté algo en mi cintura y sentí un golpe fuerte.
"¿Estoy muerta?" pensé. Una cálida sensación me cubría, me sentía en paz. Un cosquilleo se adentraba dentro de mi. Solamente sentía ese cosquilleo a tu lado. Comencé  a llorar, me daba miedo abrir los párpados. "¿Estoy a tu lado de nuevo?" Sonreí. 
Entonces fue cuando una mano me rozó la mejilla, limpiándome las lágrimas. "No puede ser, eres tu". Abrí los ojos, el alma se me cayó al suelo. Me encontré con Carlos, llorando, suplicando que no me muriera. Reaccionó al verme abrirlos. 
-  Marta...  menos mal- le sequé las lágrimas. "¿Por qué lloraba por mi?"-.
- ¿Por qué lloras?
- Pensé que te habías suicidado, que te habías ido sin haberte dicho que ... -se calló-.
Fui tonta al reaccionar tan mal.
- No me he suicidado -no se lo creyó, pero prefirió no insistir-.
-Dijiste esas cosas tan bonitas que pensé que...- le abracé-.
-¿Y el camión? Estaba a punto de atropellarme.
- ¿No te acuerdas? -negué, suspiró- Cuando terminaste te seguí, dudaba si llamarte o no. Al final me di la vuelta, pensé que querrías estar sola.  Empezó a sonar el claxon de un camión, me giré. Allí te vi, en medio de la carretera, sin apartarte. Corrí hacia ti, justo a tiempo  de agarrarte por la cintura y empujarte al otro lado. ¿En qué estabas pensando? No lo vuelvas a hacer por favor.
- En él...
Me fui a levantar, pero me desplomé. Un frío dolor se apoderó de mis tobillos. Me dolían horrores. Me miraba interrogante.
-No puedo apoyar los pies, me duelen mucho los tobillos.
- ¿Los dos? -asentí- Mierda, es culpa mía no tenía que haberte tirado tan fuerte, lo siento -me quedé alucinando, ¿me pedía perdón?-.
-¿Qué lo sientes? ¡La que lo siento soy yo! Podías haber perdido la vida, por salvar la mía.
- Pero tus tobillos
-No los sentiría sino fuese por ti - le corté- Gracias por cierto, ¿como hago yo ahora para levantarme? -me dije a mi misma-.
Me cogió suavemente por la cintura y por los hombros y me levantó. "No sabía que fuese tan fuerte". Puse mis brazos alrededor de su cuello, apoyé mi cabeza en su pecho, olía tan bien. Me llevaba con mucha delicadeza, como si me fuera a romper. Embriagada en su olor, mecida entre sus brazos me dormí.  

"Goodbye my lover, Goodbye my friend. You have been the one. You have been the one for me (8)"


Me desperté, estaba en su coche, ahí estaba él. 
-Pensé que no te ibas a despertar -sonrió- ¿qué tal te encuentras?
-Creo que mejor, aunque me siguen doliendo -sentía como se me habían hinchado los pies-.
-¿Quieres que vayamos a urgencias?
-No, tampoco es para tanto.
-Pero si no puedes andar .
-Es que no quiero ser una carga, además que ya has hecho mucho por mi hoy.
-Siempre tan orgullosa. Vamos y punto, ademas que tengo que ir a hacer un par de cosas.
Me resigné y me llevó. Al llegar, salió por la puerta. Por dentro las ganas de que me volviera a coger en brazos aumentaban. "No Marta, ¿ porque piensas eso?" 
Desapareció, volvió arrastrando una silla de ruedas .Me ayudó a sentarme y me empujó hasta la puerta. La gente le saludaba. "¿Cómo conoce también el hospital?" Me llevó a una sala de espera, había una señora muy mayor ,no levantaba la mirada, parecía muy triste.La miré con pena, se parecía mucho a ella . Empecé a temblar, en seguida se dio cuenta.
-¿Tienes frío? -negué- Entonces... ¿no les tendrás miedo a los médicos? -me preguntó divertido-.
-Pues claro que no, solo que no me gustan -levantó un ceja- no me mires así, es muy normal.
-Si, en niños pequeños -le miré desafiante- bueno ya se de que disfrazarme en Halloween.
-¡Serás! -intenté pegarle pero se escapó riéndose-.
-Voy a ver si está el médico.
-Está la señora antes, Carlos -¿No la había visto? pensé-.
-Tranquilos, no estoy esperando al médico.
-Gracias -dijimos, y entró a llamarle-.
La anciana  me miraba sonriente.
-Hacéis una pareja preciosa. 
-Pareja? O no, solo somos amigos.  
-Pues entre vosotros hay amor .
Justo salió Carlos, cogió la silla, me despedí de ella y entramos. Al ver al hombre, cogí sin pensar la mano de Carlos.
-Si que les tienes miedo, si
Sin soltarme, pasó el tiempo. Tras varias radiografías, recetas y demás, salimos. Tenía un esguince leve en el izquierdo y otro más gordo en el derecho, en total, dos - tres semanas. Me llevó a casa, dentro me preguntó:
-¿Y tus padres no están a estas horas? -"Mierda, ¿no lo sabía? No quiero que me mire con cara de pena", pensé. Era la una ya-.
-Bueno no están desde hace años, vivía con mi abuela pero murió hace tres años -no sabía que decir,normal, lo que solía decir la gente era lo siento o cosas así-.
-¿Por eso le mirabas tan  triste a la viejecita de antes? - asentí-.
-Pero prefiero no hablar de ello.
-Vale, bueno yo me voy que no pinto nada a aquí.
-Quédate por favor -"¿Eso ha salido de mis labios?" pensé.




1 comentario:

  1. AAAAAAAAAAAAAAAAAAAH, ME HAS MATADO!!!
    JOE' NO PUEDO-QUIERO ESPERAR A QUE SUBAS OTRO, YO QUIERO-NECESITO LEERLO YA!!
    Oish, qué va a pasar...AAAISH, que me encantan esos dos!! AJAJAJA de veras que me encaaaanta Carlos ;')
    Besos evaporados para ti ;')
    P.D: ah, y que conste que espero muuy prontito el siguiente, eh? que si no, pos'me enfado xD

    ResponderEliminar